Evangelio y Reflexión del día. Por Fray Manuel Díaz Buiza

Juan (7,40-53)

Evangelio según san Juan (7,40-53)

En aquel tiempo, algunos de entre la gente, que habían oído los discursos de Jesús, decían:
– «Este es de verdad el profeta».
Otros decían:
-«Este es el Mesías».
Pero otros decían:
– «¿Es que de Galilea va a venir el Mesías? ¿No dice la Escritura que el Mesías vendrá del linaje de David, y de Belén, el pueblo de David?».
Y así surgió entre la gente una discordia por su causa.
Algunos querían prenderlo, pero nadie le puso la mano encima.
Los guardias del templo acudieron a los sumos sacerdotes y fariseos, y éstos les dijeron:
– «¿Por qué no lo habéis traído?»
Los guardias respondieron:
– «Jamás ha hablado nadie como ese hombre».
Los fariseos les replicaron:
– «¿También vosotros os habéis dejado embaucar? ¿Hay algún jefe o fariseo que haya creído en él? Esa gente que no entiende de la Ley son unos malditos».
Nicodemo, el que había ido en otro tiempo a visitarlo y que era fariseo, les dijo:
– «¿Acaso nuestra ley permite juzgar a nadie sin escucharlo primero y averiguar lo que ha hecho?».
Ellos le replicaron:
– «¿También tú eres galileo? Estudia y verás que de Galilea no salen profetas».
Y se volvieron cada uno a su casa.
Palabra del Señor

Hay que tomar partido. Vivir de la fe exige optar. La piedra angular se había convertido para unos en obstáculo, para otros en fundamento de la construcción. Unos pensaron que el árbol era estéril y lo cortaron de raíz; para otros, el grano se había convertido en un árbol inmenso donde todos los pájaros encontraran su nido:»y surgió entre la gente una discordia por su causa». Jesús será siempre la pregunta planteada a la fe: «¿Para vosotros, quién soy yo?» ¿Piedra de tropiezo o piedra angular? La fe es combate,
es lucha, es estar en búsqueda permanente.
¿Tu ya has optado por Él?

¡Paz y Bien!

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